AVISO II


Puede que me quede aquí,
con esta valentía falsa
que enternece a las estatuas
pero nada dice
acerca del vacío de mi estomago.

Puede que,
alguna tarde de luz sucia,
me haga pasar por otro,
y me quite la coraza
o la ropa
para culparte del frío.

Quizá quedará algo
tras esta silueta
que alberga un pánico que no cede
y se nutre
con el hambre de los años.
Sin artificios.
Sin promesas.

No podrás decir después
que no te aviso.

SÓLO UN HOMBRE



Ser hombre no es ser hombre. Ser hombre es otra cosa.
GABRIEL CELAYA




Dije no soy todos los hombres
sólo un hombre.


Y levantaste en mis palabras
un árbol de corteza viva,
de savia limpia y que amenaza.

Y no era yo
pues en mí late
el adolescente prehistórico que sonríe,
la venda sin herida,
la mirada del lobo que marca el territorio.

Dije sólo soy un hombre.
Y fui ese arcángel que escupe a los espejos.

Desafortunado y fortuito
como la catástrofe.

Como estas manos.

Como estos días.

Como esto que ahora digo.

LUCIDEZ PRIMERA


Una vez
-completamente borracho-
juré que no te olvidaría nunca

Ahora
-tras mucho tiempo-
he aprendido
a reírme de aquello

Aunque
-pensándolo bien-
maldita
la gracia

ME SALVO


A veces los ciclos se cierran confusos
y soy un loco
que grita por las calles o espanta mariposas.

Un filo de navaja que exige sacrificios.

Soy viajero eterno entre ruinas y eriales
y abismos
y grutas.

Entonces cobijo mis fugas
en la curva de tu vientre.

En la equis de tu sexo:
ecuación de asombros
que tiende a infinito.

Entonces
me salvo.

AJUSTE DE CUENTAS

(mil novecientos noventa y tantos)


Porque me quedé en los huesos
mientras hacía pronósticos
que anunciaran de improviso tu presencia.
Calculando coordenadas
o poniendo cruces
en las guías de carretera
hasta trazar mi ruta exacta.
Como quién ajusta,
con la precisión del cirujano,
un puzle de frases
para lograr que digan
lo que quieren los oídos.

Porque el otoño amenaza
o qué se yo
inicio ahora la costumbre de olvidarte.


Y ya me callo.

UTILIDADES DEL DESASTRE



Como nubes de agosto, todo pasa.
La vida nos demuestra
que se puede vivir sin casi todo.
JAVIER SALVAGO


Tarde descubrimos
las palabras adecuadas y la temperatura idónea
para el abracadabra.

Ignorábamos que la vida se afana
en imponer sus reglas,
a fuerza de hacernos creer
que no las tiene.

Lo sé,
prometí que te dejaría quererme.
Mentí.

Y he seguido,
con esta libertad condicional,
intentando buscarle
utilidades al desastre.

LLEGARÁS




Llegarás
para tallar tu nombre en mis costillas
y ordenar mi pulso con tu risa.

Llegarás
para dejar que macere tu lengua en mi saliva.
Para liberar las lineas de mi mano
y pintar mis palmas con colores de guerra
o hacerte patria en mi ombligo.

Llegarás para limar mis vértices.
Para fundar las nostalgias que alimenten mi futuro.
Para restarme miedos.

Llegarás para morder mi nuca
mientras duermo y
convertir mis ojos en verbena de pueblo pequeño.

Llegarás como el naufrago agotado
en busca del descanso que promete la costa.

REBAJAS


Qué dirán los psiquiatras
de esta obsesión por buscarte
en el reflejo de
todos los escaparates.

MENTIRA


Necesito saberme solo,
abandonarme al naufragio.
Adivinar que el camino
se derrumba.

Sentir que no hay
naves para quemar y
el amor no existe más allá del relámpago.

Quizá todo es falso.
Todo producto del trazo de mis dedos.
No hay mariposas.
Ni bocas pintadas.

Sólo algunos sueños
con su ancla en otra vida.
Sólo en tránsito de la sangre
en dirección contraria.

Soy yo el que acaricia con las manos yermas.

NO SE NADA


No sé nada
más allá de lo que he aprendido
en algunos libros
o en algunos cuerpos.

Por eso te pido que si me ves,
alguna vez,
vagando por las calles,
silbando la melodía
de algún bolero o
contando uno a uno mis pasos,
sepas apartarte,
buscar refugio
y
me enseñes
a ser dócil con la vida,
con lo inevitable,
con los datos.

A ser
materia en paz.

POCO QUE DECIR


Tengo poco que decir,
si acaso que me marcho derrotado
porque mis ojos no saben conjugar tus verbos.
Que no me acuden las palabras
y aunque no me encuentro bajo la ropa
no dejo de buscar el tímido latido
que recuerdo.
En fin, poca cosa.
Observar por la ventana
que todo sigue intacto:
la gente,
los árboles,
los perros.

ESTE DÍA


Soy huésped de este día que empieza
y mata mis pupilas con su olor a humo.

Este día que merece ser
el peor de los inviernos.

Yo lo sé
y por eso convoco mis miedos.
Le hablo bajito al frío de mi estómago.
Repito las estúpidas preguntas de siempre.

Yo lo sé
este día, que pretende ser metáfora del resto,
golpeará mi cuerpo hasta tirarme de la cama,
hasta activarme,
y decirme en su idioma
que el único enemigo

soy yo.


Tenerte sería morder la humedad
del invierno.
Saltar los bancos de la calle con pies fabulosos.
Bañarme en la luz de las farolas.

Tenerte entre los números del calendario
y domar las estaciones.
Habitar la lluvia. Empaparme en su ruido.

Si estuvieras mi corazón sería
una muchedumbre rabiosa
que pide su pan.

Pero no estás y hago poemas.

REQUIEM


Aquí no yace por azar ese llanto
dejado a la tierra.
Esa estatua con los labios doblados hacia dentro.
El dolor con ojos de animal.

Este sitio es el espacio que ocupa
la propia tierra, que nos devuelve la sombra
hecha carne
y da lugar a la hermosura antigua,
como una mano que ofrece su cáliz ciegamente.
Tengo en los ojos mucho, y he caminado
fundiéndome en lo que nombro, con
el amor del mar que no explica en lenguajes.

SERIA BONITO


Sería bonito tenerte también ahora.
Adivinando tu lenguaje y creyendo en el matemático
sonido de tus muslos.

Sería bonito poder hacerlo ahora.

Y romper esta hoja serenamente,
justificadamente.

Sería bonito perseverar sin rabia,
habitar la noche tuya, sin el hilo que se pierde,
cuadrando mis manos a tu forma,
y no sentir en cada crepúsculo el error absurdo de amarte.

TU TACTO



Tócame con la oscura rectitud de la noche furiosa,
atenazando mis fronteras con el escarpado dolor
de tu espuma diferente.
Tócame en esta materia extensa y grave,
sin el indeciso temor recogido en otros pulsos:
como se establece un deseo en el cauce de unos brazos que son propios.
En este fragmento, que sobrevive, poblado
de desórdenes blandísimos.
Estrecho ámbito criminal y desnudo.

Tu tacto para la unidad ensimismada
de mi cuerpo confuso,
para el cielo oculto de este sueño que acelera
la tempestad y la sangre,
para mi madera crecida y resuelta en el
espacio virgen que poseo.

En tí siembro unas manos con raices y
una frente que no agita su sentido.

Todo se propagará en la luz ferrea de
que estamos hechos,
habitando el territorio dormido del tiempo,
sin llanto y sin asombro.

DECEPCION



En el atardecer inmisericordioso
han llamado a golpes a la puerta.

Toc.

(Pienso en la lucha extensa
y animal que me cubre como un sudor
plastificado, en el temor antiquísimo
del que no obedece gobierno)

Toc.

(Pienso mi cuerpo con la forma
precisa de la carne).

Recojo mis manos. No me hallo.
Salí en tu busca por las calles piadosas
del pretérito.

LA INCOGNITA




La incógnita escondida
como inhumano ritual,
que me sitúa entre miles de cósmicas heridas,
inconmensurables, bárbaras, ocultas.

La incógnita que me sujeta
a la fuerza de mis brazos,
simultanea y necesaria,
que late despojándome del tiempo.

La incógnita que se me ha cosido a la piel
y se injerta sin transcurso, para asomar
ciertamente cuando quiere.

Eso es lo que tengo.

TU HERIDA


Hallo en tí toda posibilidad
de herir:
Ver paisajes de trigo encendido
en cada mirada,
el dolor de la lluvia, proponiendo
el misterio de, tal vez, el amor en tu cabeza.
Saber que si cojo tu brazo
notaré el latido de un dios perderse en el cauce de tu sangre.

TU NOMBRE


A veces ocurre que escribo
tu nombre
y creo que es un poema
Cojo
tu nombre
y con él hago
cruces
filas
números
cojo
tu nombre
y hago
versos y
versos
Porque a veces ocurre que
tu nombre
es un poema.

TU BOCA


Tu boca suena a boca de demonio o
a la memoria de un Dios
que me despoja de ti.

He sabido,
de esa noche, que debo ponerle nombres
a la soledad, por no traicionar
a tu alma.

Así, si supiera
lo tan secreto de tus actos, habría
muerto mucho antes.

CALCULOS

Después de hacer cálculos, me pregunto si no me salen más caras las palabras que callo que las que digo.

LOS AMANTES


La carn vol carn.Ausiàs March


"No había en Valencia dos amantes como nosotros.

Ferozmente nos amábamos de la mañana a la noche.
Lo recuerdo todo mientras tiendes la ropa.
Han pasado años, muchos años; han pasado muchas cosas.
De pronto aún me atrapa aquel viento o el amor
y rodamos por el suelo entre abrazos y besos.
No comprendemos el amor como una costumbre amable,
como una costumbre pacífica de cumplidos y telas
(y que nos perdone el casto señor López-Picó).
Se despierta, de pronto, como un viejo huracán,
y nos tumba a los dos en el suelo, nos junta, nos empuja.
Yo deseaba, a veces, un amor educado
y el tocadiscos en marcha, negligentemente besándote,
ahora un hombro y después el lóbulo de una oreja.
Nuestro amor es un amor brusco y salvaje,
y tenemos la añoranza amarga de la tierra,
de andar a revolcones entre besos y arañazos.
¡Qué queréis que haga! Elemental, ya lo sé.
Ignoramos a Petrarca e ignoramos muchas cosas.
Las Estancias de Riba y las Rimas de Bécquer.
Después, tumbados en el suelo de cualquier manera,
comprendemos que somos unos bárbaros, y que esto no puede ser,
que no estamos en la edad, y todo esto y aquello.

No había en Valencia dos amantes como nosotros,
porque amantes como nosotros se han parido muy pocos."

VICENT ANDRES ESTELLES

HABITARAS MI SILENCIO

A veces
gritar es acariciarte los muslos o torpemente
girar con el escualo de tu sueño aterido

Tropezar en la blancura,
sumir la negra boca en tu pelo y sentir
hambre en las raíces

A veces aullar es amarte,
jugar a los dados con un lobo, otear
en el aire arrasado las naves
de la sangre. Creí que te besaba
cuando la hoz solar me cercenó los labios.

JORGE RIECHMANN
De "La verdad es un fuego donde ardemos"

LUNES

Me alegra mucho que los días pasen
y eso me entristece tanto...

VICEVERSA

Tengo miedo de verte
necesidad de verte
esperanza de verte
desazones de verte.
Tengo ganas de hallarte
preocupación de hallarte
certidumbre de hallarte
pobres dudas de hallarte.
Tengo urgencia de oírte
alegría de oírte
buena suerte de oírte
y temores de oírte.
O sea,
resumiendo
estoy jodido
y radiante
quizá más lo primero
que lo segundo
y también
viceversa.

MARIO BENEDETTI

EL DESAYUNO


Me gustas cuando dices tonterías,
cuando metes la pata, cuando mientes,
cuando te vas de compras con tu madre
y llego tarde al cine por tu culpa.
Me gustas más cuando es mi cumpleaños
y me cubres de besos y de tartas,
o cuando eres feliz y se te nota,
o cuando eres genial con una frase
que lo resume todo, o cuando ríes
(tu risa es una ducha en el infierno),
o cuando me perdonas un olvido.
Pero aún me gustas más, tanto que casi
no puedo resistir lo que me gustas,
cuando, llena de vida, te despiertas
y lo primero que haces es decirme:
«Tengo un hambre feroz esta mañana.
Voy a empezar contigo el desayuno».



LUIS ALBERTO DE CUENCA

FALSO

La radio, la televisión
y los periódicos
dicen que ya es primavera.
Pero es absolutamente
falso.

NO SE

Yo no sé si puedo hablarte.
La fuerza que exalta mis resortes
y esa triste locura nocturna vienen de tí.

He perdido horas delicadas en buscar
la manera de una forma tan lejana a mí
dando la mano a cada mano precisa.
Ahora ando partido, arrastrando mi
cuerpo, que es ya sólo un nombre
por el pavimento

Ofreciendo lo que digo siendo esperma.
Tomando esa boca dilatada como un alma.
Confundiendo las ventanas de tu forma

tan del mundo.

AVISO


Porque prefiero partir
con esta mirada que pongo en tu hombro,
desusada y púdica-ya sabes-
no me tomes, si quieres, la sonrisa
en serio. No me derrumbe,
desahuciado,
de pena

SE PIANGE, SE RIDI

Te diré que no supe si reír o llorar
después de todo
pero estaba feliz,
demasiado feliz, sospecho ahora.
Recuerdo que me hablaste
de que empezaba a amanecer,
el cielo parecía algodón sucio.
Lo más inolvidable será siempre
el aire fresco y dulce que crecía,
igual que una caricia, entre dos luces.
Yo estaba sola
y tú quisiste ser mi amigo:
que esto no rompa la amistad, dijimos.
Pero fue hermoso más que un sueño,
mucho más inquietante que un puente entre la bruma
y aquel coche sin duda más maravilloso
que un bosque de la Alhambra
y tu corazón más hondo y más extenso
que el manto de la aurora
cuando llorando me asomé al balcónde tus ojos.
Por eso ahora escuece la distancia
como ella sola y el deseo -cruel-
asoma cada minuto
-con el peligro que eso entraña
para una sencilla amistad-
ahora no puedo menos que aceptar
lo que fue un verdadero error de cálculo:
esta suave tristeza insoportable
con la que no contábamos.

ANGELES MORA De "Cámara subjetiva" 1996

LUCIDEZ SEGUNDA


Todo mi calor te explica.
Cosida como estás al mapa de mi vida.
Creando con saliva la campana de mis ojos.
Así es.
Esta lluvia de octubre me mata desde antes.
Me duele en la tripa como un tren que se marcha.
Y lloro. Sólo a veces. Como lloran las putas
que no tienen nombre.
Tu boca es un secreto que nunca me perdonaré.
Una costumbre dulcísima.
Un animal que acude a mi llamada.
Quién me creerá si digo que me obstino en aprenderte.
En memorizar tus estrategias y procedimientos.
Así es.
Esta lluvia de octubre me asesina.
Me tiende trampas. Me oculta las señales.
Y todo este desorden.
Y el criminal desnudo de mi sangre.
Y mi sudor codificado como un mensaje de guerra.
Y el exterior manteniendo su murmullo.
Como el universo ese
el universo de nuestra memoria.

EXCUSA


He vuelto a fumar.
He vuelto a revisar mis libros de poemas.
A escuchar canciones de amor y de tristeza.
He vuelto a comer menos y peor
de lo que debería.
A dormir mal y a despertarme
deseando que se vuelva a hacer de noche.
He vuelto a llenar los papeles
con tachones y a escribir palabras
sin sentido en las esquinas de los folios.

Nada que ver contigo.

Se me ocurre como excusa el exceso de trabajo.


CERTEZA TARDÍA


Mi cerebro se empeña en sobreprogteger a mi corazón.


El muy miserable.


DE CASI TODO HACE 15 AÑOS




Como sé que no pueden las palabras de nuevo
entregarme los días que perdí para siempre,
dejo en paz tu memoria, las cenizas del tiempo:

no escribiré esta tarde nada que te recuerde.


ELOY SANCHEZ ROSILLO

YA NO


Ya no será
ya no
no viviremos juntos
no criaré a tu hijo
no coseré tu ropa
no te tendré de noche
no te besaré al irme
nunca sabrás quién fui
por qué me amaron otros.
No llegaré a saber
por qué ni cómo nunca
ni si era verdad
lo que dijiste que era
ni quién fuiste
ni qué fui para ti
ni cómo hubiera sido
vivir juntos
querernos
esperarnos
estar.
Ya no soy más que yo
para siempre y tú
ya
no serás para mí
más que tú. Ya no estás
en un día futuro
no sabré donde vives
con quién
ni si te acuerdas.
No me abrazarás nunca
como esa noche
nunca.
No volveré a tocarte.
No te veré morir.

Idea Vilariño

PRIMER DÍA


HIPOTESIS CIENTIFICA


Nada dice acerca del amor
la hipótesis biológica
de que se trata de una reacción química.

No tengo ningún inconveniente en admitir
que te aman mis jugos interiores
que tu ausencia me intoxica la sangre de negra bilis
que al contemplarte
sube la tasa de mi monóxido de carbono
y los linfocitos se reproducen alocadamente.

Si me pongo lírica
Y se me traba la lengua
¿cómo no reconocer que alteras mi metabolismo basal
y entorpeces mis digestiones?

Mis narinas tiemblan
aumenta la presión de mi sangre
enrojezco y me altero
o sudo y palidezco.

Mi amor es gutural e instintivo
como el celo de los animales.
Cualquier metáfora que erija
como un vestido sobre la epidermis
será artificio.

Y sin embargo,
cuando te hablo,
evoco leyendas antiguas:
Tristán, Iseo, la cruel Turandot,
Dido, la enamorada y la indiferente Helena
se amontonan en mi boca,
viajan
en ríos blancos de saliva.

Hipótesis científica
o cultura,
lo mismo da:
mis vísceras no distinguen,
aman, sin preguntarse qué es el amor.
CRISTINA PERI ROSSI