LUCIDEZ SEGUNDA


Todo mi calor te explica.
Cosida como estás al mapa de mi vida.
Creando con saliva la campana de mis ojos.
Así es.
Esta lluvia de octubre me mata desde antes.
Me duele en la tripa como un tren que se marcha.
Y lloro. Sólo a veces. Como lloran las putas
que no tienen nombre.
Tu boca es un secreto que nunca me perdonaré.
Una costumbre dulcísima.
Un animal que acude a mi llamada.
Quién me creerá si digo que me obstino en aprenderte.
En memorizar tus estrategias y procedimientos.
Así es.
Esta lluvia de octubre me asesina.
Me tiende trampas. Me oculta las señales.
Y todo este desorden.
Y el criminal desnudo de mi sangre.
Y mi sudor codificado como un mensaje de guerra.
Y el exterior manteniendo su murmullo.
Como el universo ese
el universo de nuestra memoria.

1 comentario:

  1. Gracias a ti, por el tuyo y por tu visita. Ya veo que compartimos a Idea Vilariño, y seguro que más cosas. Un saludo desde Asturias.

    Natalia

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